Restauración de antigüedades

Restauración de antigüedades

La restauración como medio de conservación del propio patrimonio artístico, cultural y el mobiliario.

Las más de las veces aún a pesar de pasar varias veces al día al lado de ellos, no nos detenemos ni un minuto a contemplar y disfrutar bien sea en nuestro domicilio o incluso en algunos lugares de trabajo singulares -organismos, bufetes, consultorios privados diversos- los objetos de arte cultural o mobiliario artístico, de gran valor muchas veces, que se encuentran a nuestro paso, ni tan siquiera volvemos la cabeza hacia el sitio en que se encuentran.

En tales ocasiones, tales piezas de Arte o elementos destacados, de gran excelencia y valor patrimonial del mobiliario, de gran prestigio, que en el caso domiciliario la mayoría de las veces o se han heredado o bien han sido adquiridos por gusto propio, o en el caso de los lugares a los que acudimos por quehaceres propios de gestiones en el trabajo son de un gran valor cultural, pasan la mayoría de las veces desapercibidas por causa de nuestro “rápido ir y venir”, sin poder alcanzar la función que teóricamente debieran, no siendo otra que deleitar la vista y el pensamiento cultural con su belleza artística. No siempre totalmente bellas a la vista, puesto que también a veces, bien por desidia personal, achacando a la falta de tiempo, o en las que no están en lugares privados, quedan fuera de los cuidados y mantenimiento que las mismas requerirían para su total lucidez y esplendor como bienes y elementos de cultura.

Por ello deseamos destacar que es muy conveniente y necesaria la restauración o su rehabilitación, tanto en caso del patrimonio privado como en el de carácter público -bien sea de empresas u organismos tales- es  necesario y fundamental para que este tipo de joyas del arte, -muchas de las veces únicas y por lo tanto exclusivas con gran excelencia- mantengan su inicial belleza y admiración en su contemplación, sin mermar como sería en el caso contrario, su singular atractivo ni valor, tanto cultural como económico, que en bastantes ocasiones provoca en estos bienes artísticos y culturales el paso del tiempo y los elementos ambientales naturales.

Expuesto el anterior preámbulo, pasamos a explicar lo que recomendamos.

La restauración y el mantenimiento de los objetos, piezas y elementos mobiliarios del patrimonio tanto de un particular como el de carácter público son altamente necesarios. Porqué se preguntarán muchos, si en casa no se toca ni estropea nadie las tallas, muebles o piezas que adornan el hogar. Pues precisamente por ello, por el “aislamiento” en el que se encuentran un sin fin de objetos, piezas diversas, muebles antiguos y esculturas de arte, en las que a pesar de creer que “con pasárselas el plumero ya está”, no se considera debe hacérselas nada más, siendo de todo punto errónea esta convicción. El paso del tiempo, el polvo ambiental, si son consideradas antiguas mucho más, y no digamos si de no darnos cuenta o apreciarlo los elementos xilófagos hubiesen penetrado y colonizado las mismas, el deterioro y destrucción no es a veces perceptible, pero puede llegar a ser completamente irreparable. Por lo tanto nuestra recomendación y consejo, es que si es propietario de una obra de Arte, pieza de mobiliario antigua u objeto de madera de valor, de la índole que sea, más pronto que tarde no deje Vd. de acudir y consultar a un restaurador profesional y experto, sobre  el estado en que se encuentran las mismas. Las minutas que tuviese que abonar en casos de simple dictamen y consulta técnica, son una inversión que no le causarán probablemente ningún trastorno económico, dado el valor de su patrimonio de arte, y de resultar del análisis ser necesaria una actuación sobre alguno de los elementos de su patrimonio artístico, el restaurador le presupuestará para su total restauración y consecuente conservación y devolución a su adecuado estado, los componentes del mismo, mereciéndole la consulta la inversión que realice para la rehabilitación con su restauración, para el mantenimiento de la belleza y el valor económico de los objetos de su patrimonio artístico y mobiliario.

Consecuentemente a lo que hemos recomendado anteriormente, en cuanto pueda, no deje de considerar establecer un contacto con un profesional restaurador, para que le brinde su asesoramiento y en el caso de ser necesario, acometa la rehabilitación de su patrimonio tanto de sus bienes de Arte como del Mobiliario y otros afines.